¿Qué es la red oscura?
La red oscura es una parte de Internet que no está indexada por los motores de búsqueda tradicionales y a la que solo se puede acceder a través de herramientas específicas como Tor o I2P.
Aunque a menudo se lo equipara con una actividad delictiva, también lo utilizan periodistas, activistas y otras personas que buscan proteger su anonimato.
Darknet y cripto: ¿por qué esta asociación?
Las criptomonedas, en particular Bitcoin, se perciben como anónimas y difíciles de rastrear, lo que las hace atractivas para las transacciones en la red oscura. En realidad, Bitcoin ofrece seudónimo y cada transacción se registra en una cadena de bloques pública.
Sin embargo, otras criptomonedas como Monero o Zcash, diseñadas para garantizar un verdadero anonimato, son cada vez más preferidas en estos contextos.
Las cifras clave: cripto versus dinero fiduciario
Según un informe de Chainalysis publicado en 2024, aproximadamente el 0,24% de todas las transacciones de criptomonedas estaban vinculadas a actividades ilícitas, frente al 2% en 2019 .
En comparación, un estudio de la ONU estima que entre el 2 y el 5 por ciento del PIB mundial (valorado en aproximadamente entre 1,6 y 4 billones de dólares) proviene de transacciones relacionadas con el crimen a través de monedas fiduciarias.
Estas cifras muestran que la escala de actividad ilícita en moneda fiduciaria es mucho mayor que la de las criptomonedas.
¿Cuáles son las historias en las que se mezclan la darknet y las criptomonedas?
Ruta de la Seda (2011-2013)
El caso de Silk Road es emblemático del uso de criptomonedas en la red oscura. Fundado por Ross Ulbricht, este mercado en línea permitía comprar drogas, armas y otros productos ilícitos, todo a cambio de Bitcoin.
Silk Road creció rápidamente en popularidad, atrayendo a miles de usuarios y generando cientos de millones de dólares en volumen de operaciones. En 2013, una operación conjunta del FBI y otras agencias internacionales condujo al arresto de Ulbricht y al cierre del sitio.
Las fuerzas del orden incautaron aproximadamente 26.000 Bitcoins, valorados en ese momento en casi 3,6 millones de dólares. Este caso marcó un punto de inflexión en la evolución de la percepción pública de las criptomonedas.

Bahía Alfa (2014-2017)
AlphaBay, a menudo considerado el sucesor de Silk Road, surgió en 2014 y rápidamente se convirtió en el mercado ilícito más grande de la red oscura. La plataforma ofrecía una amplia gama de productos, desde drogas hasta datos robados, y aceptaba varias criptomonedas, incluidas Bitcoin, Monero y Ethereum.
En julio de 2017, las autoridades desmantelaron el sitio mediante una operación internacional en la que participaron Europol, el FBI y otras agencias. Alexandre Cazes, administrador de AlphaBay, fue detenido en Tailandia. Tras su arresto, fue encontrado muerto en su celda, en circunstancias que se cree que fueron un suicidio.
Oleoducto colonial (2021)
En mayo de 2021, un importante ciberataque paralizó el Colonial Pipeline, un sistema crítico para la distribución de combustible en Estados Unidos. El grupo de hackers DarkSide, especializado en ransomware, exigió un rescate de 4,4 millones de dólares pagados en Bitcoin.
Aunque se realizó el pago, el FBI pudo rápidamente rastrear y recuperar gran parte de los fondos. Este incidente puso de relieve tanto la vulnerabilidad de la infraestructura crítica como la dificultad para los delincuentes de ocultar sus huellas en una cadena de bloques pública.
El papel de Monero en los mercados modernos
Desde la aparición de Monero, los mercados de la darknet han adoptado cada vez más esta criptomoneda.
A diferencia de Bitcoin, Monero ofrece mayor privacidad al ocultar los montos de las transacciones, los remitentes y los destinatarios.
En 2024, Chainalysis informó que casi el 90% de las transacciones en los mercados de la red oscura involucraban a Monero. Plataformas como White House Market, que estuvo en funcionamiento hasta su cierre voluntario en 2021, solo aceptaban Monero para aumentar la seguridad de los usuarios.
Esfuerzos para controlar el uso ilícito
Los reguladores, las fuerzas del orden y las empresas de blockchain analizan activamente las transacciones sospechosas para identificar y prevenir abusos. A continuación se muestran algunas iniciativas destacadas:
Herramientas de trazabilidad: empresas como Chainalysis, Elliptic y CipherTrace utilizan análisis de blockchain para monitorear la actividad delictiva. Por ejemplo, Chainalysis jugó un papel crucial en el seguimiento de los fondos robados durante el ataque al Colonial Pipeline.
Mayor seguridad: los intercambios imponen procedimientos de verificación KYC (Conozca a su cliente) para limitar el uso de criptomonedas con fines ilícitos. En 2023, Binance colaboró con Interpol para ayudar a desmantelar una red de lavado de dinero.
Colaboración internacional: las operaciones conjuntas entre Europol, el FBI y otras agencias han dado como resultado el cierre de varios mercados de la red oscura, reduciendo su impacto.
Conclusión: ¿mito o realidad?
Aunque las criptomonedas se utilizan en la red oscura para actividades ilegales, representan una pequeña porción del total de las transacciones.
Los datos muestran que el dinero fiduciario sigue siendo el medio preferido para financiar actividades delictivas. Además, la transparencia inherente a la mayoría de las cadenas de bloques permite un seguimiento eficaz, lo que hace que su uso sea menos atractivo para los delincuentes.
En resumen, aunque la asociación entre las criptomonedas y la red oscura es real, a menudo se ve amplificada por las percepciones populares y los medios de comunicación. Con una mayor regulación y herramientas de trazabilidad, se espera que el uso ilícito de criptomonedas siga disminuyendo en los próximos año
Fuentes
Chainalysis: informe anual sobre criptomonedas y actividades ilícitas (2024). Disponible en https://www.chainalysis.com.
Naciones Unidas: estudio sobre lavado de dinero y uso de monedas fiduciarias (2024). Disponible a través de https://www.unodc.org.